ORIGEN DEL TABAQUISMO
La primera evidencia histórica del tabaco es un fósil de hojas de tabaco descubierto en 2010 en Perú. Se ha calculado que corresponde a la era del pleistoceno, aproximadamente 2,5 millones de años antes de Cristo.
Hace 10.000 años el tabaco se cultivaba de manera habitual y se utilizaba en ceremonias religiosas entre los pueblos indígenas de Centro y Norteamérica.
Hacia el siglo I después de Cristo, el tabaco había conquistado todas las tierras de cultivo de América.
El primer contacto de los europeos con el tabaco se produjo cuando fue presentado por los indígenas locales.
A mediados del siglo XVI, el tabaco se consideraba una planta con propiedades curativas. Jean Nicot, entonces embajador francés en Lisboa, realizó una serie de experimentos para evidenciar el carácter curativo del tabaco, y dio el nombre al principal alcaloide de la planta: la nicotina.
Al inicio del siglo XVIII el tabaco se podía encontrar en cualquier rincón del globo.
En 1881, se patenta la primera maquina capaz de producir cigarrillos. Era capaz de producir 120.000 cigarrillos al día y con ella se comenzó el crecimiento exponencial de su consumo.
El comienzo del conocimiento científico que vincula tabaco a enfermedad se produce al inicio del siglo XX apareciendo artículos en revistas médicas sobre sus efectos sobre la salud. En 1954 un epidemiólogo británico Richard Doll publicó un estudio epidemiológico que demuestra que los fumadores podían sufrir cáncer de pulmón con mucha mayor probabilidad. En 1964 se publica el famoso "informe del cirujano general de Estados Unidos", detallando la creciente evidencia científica sobre el daño del tabaco a la salud humana, y relacionando inequívocamente el nexo causal entre el tabaquismo y el cáncer de pulmón en hombres.
Comentarios
Publicar un comentario